Son tiempos de extrañeza. Nada es como esperaba. La partida repentina de Jóse me hace habitar el Bierzo de una forma desconocida. Su sombra camina a mi lado como un recuerdo tenue pero persistente. Hablaba una lengua indómita, ajena a todos nosotros, plagada de silencios. Habitaba un lugar indescifrable. Tenia alma de rayano y parecía como si hiciera ya mucho tiempo que no estaba entre nosotros. Quizás nunca lo estuvo, como le ocurre a los santos, o a los locos. Pero en el azaroso devenir de la existencia se acababa sutilmente por desvelar quien era el hombre, un compañero mas que fiable en el que apoyarse, un amigo que respondía solo cuando ya nadie mas lo hacía, uno cuya verdadera naturaleza se manifiesta cuando ya no está. Por eso venir aquí, en este plano de la existencia se siente extraño e insondable ahora que ya no está para acunarnos desde el sombrío silencio. Debemos pues continuar en su memoria, y así lo haremos, pues es una pulsación profunda e involuntaria que quizás nos sirva de sortilegio para aplacar el miedo. Yo lo haré con la mi Sofía, este próximo viernes 3 de octubre a las 20:30 horas horas en la Ciuden de Ponferrada, venid a acompañarnos, no queremos estar solos. (el concierto se enmarca en el programa Dinamiz-ARTj, una iniciativa del Instituto para la Transición Justa (ITJ) y la propia CIUDEN para dinamizar la cultura en municipios afectados por el cierre de la minería y las centrales térmicas y nucleares)